martes, 11 de abril de 2023

LA PRIMERA PIEDRA

La primera palabra será la piedra cayendo, 
un golpe al filo de oprimir la marca, 
un sello eterno de tinta, de agua, 
      segundo 
            a segundo 
                  cayendo. 

He bajado, y con ello: 
cadáveres han descendido en la lluvia.
La imagen matrona se unta las nubes en las sienes rotas 
dispuesta a frotar un pesar, 
de no sé qué sonados siglos. 

No conozo ya el transitar de una hora, 
la impaciencia me conecta a un artificio, 
me abre a un círculo de sombras periféricas. 

Del salitre soy enemigo. Una chispa 
de granos salobres resquebrajan la espalda 
y deshacen el rastro de serpiente en el silencio. 

La primera palabra es la piedra cayendo 
un golpe al filo de la marca, un sello eterno de tinta, 
segundo a segundo cayendo. 

He bajado, y con ello una escalera deshace mis pasos, 
los convierte en registro invisible 
de una pincelada futurista. 

Algo andará por los pasillos de la casa vieja. 
En la orfandad mis marcas buscan su destino, 
algo que deshaga los nudos de un hilo corrosivo. 

En la frente se reproducen sombras 
y una letras se van de hocico hacia el papel, 
muertas al saberse congeladas. 

La primera palabra 
es una piedra cayendo. 

Un golpe al filo de oprimir la marca 
un sello eterno de tinta, 
de agua, 
      gota a gota, 
            segundo a segundo 
                  cayendo. 


(De El sello de la tinta, 2022, Editorial Catorce, Veracruz, Ver. pp. 11-13)

No hay comentarios: